17 octubre 2006

Proyecto Casa de Muñeca, Parte 1

Mi hija, Florencia, cumple 4 años en Diciembre. Desde hace un poco más de un año me cambié de departamento a casa, y los cambios han sido notables. Me fui a vivir "a las afueras" de Santiago, camino a Viña, en un lugar con buen aire, un ambiente muy grato y mucho verde, todo muy tranquilo, como un oasis en Santiago. Yo soy de Punta Arenas y nací y me crié en una casa, por lo que los departamentos no van conmigo.
Bueno, mi hija está de cumpleaños y quería un perrito ... y extrañamente mi señora estaba de acuerdo, pero yo no. A la larga, iba a ser yo quien se ocupe de él en todo lo referente a sus "gracias". Entonces me puse en campaña para lograr sacar esa idea de la cabeza de mi hija (que es de idea fija) y logré la negociación "perfecta": una casita de muñecas para instalar en el patio.
Si ... la idea era perfecta, hasta que la aterricé a la realidad. Yo pensé en la casita casi como un juguete grande, pero ahí comenzó mi proyecto. Por supuesto, como carpintero soy un muy buen consultor. Antes de llegar a la casa no había tenido oportunidad de enfrentar los proyectos hogareños, como entrada de vehículos, loggia, terraza, pasto! ... sí, el simple y sencillo pasto!
Cuento corto, en este año que llevo viviendo ahí he aprendido más de carpintería, electricidad y jardinería que en toda mi vida. Sin embargo, construir una casita de muñeca, aunque suene tierno, es todo un desafío. Si casi es como una casa de verdad, pero en miniatura: pilares, paredes, techo, piso, aislante, revestimiento, tejas, puertas y ventanas, además de todos los pernos, tornillos, pegamento, pintura, barniz, y herramientas que hay que utilizar.
Sí, es una de las pocas veces en mi vida que estoy enfrentando un proyecto sin tener la más mínima experiencia o conocimientos del tema. Pero el objetivo y "cliente" del proyecto es la motivación, mi hija y su inmensa felicidad. La casita de muñecas, por lo que me dice mi señora, es el sueño de toda niña.
Con esos argumentos, he comenzado el anteproyecto. Después de todo, soy un ingeniero, un consultor, un "animal de proyectos", así que me metí en Internet, hablé con maestros, coticé materiales, fui al Homecenter y he hecho unos 20 diseños de la casita.
Hasta ahora, he logrado diseñar la casa, cotizar materiales y entender cómo debo ejecutar el proyecto. En el papel, todo bien. Seguramente me haré "asesorar" por un maestro carpintero en los temas más complejos.
Este proyecto de vida tiene muchas similitudes con los proyectos en los que trabajo. Sin embargo la diferencia más fundamental en él es mi particular cliente ... o mejor dicho clienta, ya que no habrá boleta de garantía que valga si no logro cumplir con lo contratado de palabra.
Ahora estoy ansioso, ya que para mi es toda una aventura que espero termine con una gran sonrisa.
Les contaré como me va cuando comience a "ejecutar la obra", y por supuesto subiré fotos a medida que avance, siempre y cuando no me de por mandar todo a buena parte y haga un cheque para comprarla. El efecto final en mi clienta sería el mismo, pero el sentimiento del ejecutor (yo) no. No sería lo mismo.
Un abrazo a todos.